
Inglés profesional a medida

Vivimos en la era de la abundancia y rapidez: demasiadas apps, demasiadas nuevas reglas, demasiados podcasts, expertos en todo hasta debajo de las piedras. Es que literalmente levantas cualquier piedra y ahí encontrarás una persona experta en algo sonriéndote. Masterclasses y consejos everywhere a una velocidad supersónica con resultados garantizados ultrarrápidos. Sumidos en el escroleo infinito. Páginas mostrando contenido estilo TikTok, Youtube shorts y reels de 5 a 10 segundos. Todo esto ha acortado nuestra capacidad de atención e interés por aprender notablemente. Lograr la atención de alguien más de un minuto en una publicación escrita ya es un gran logro. Casi nadie leerá todo este rollo que me estoy pegando aquí. Hubiera sido mejor un video de 5 segundos. El problema ya no es la falta de recursos, sino el exceso y la velocidad con la que nos llegan, el tiempo que estamos dispuestos a dedicar a las cosas que nos interesan y nos vienen bien y desechar lo demás. Y no, no existe tiempo para abarcarlo y desecharlo todo, así que acortamos y aceleramos. Me da la sensación de que las carreras universitarias pronto se podrán sacar en una semana.
Ahí es donde entra mi trabajo: no enseño “todo el inglés del mundo”, sino el inglés que importa en el tuyo.
Selecciono, diseño y personalizo el idioma que realmente necesitas en tu vida personal y profesional desechando el ruido.
Para un programador, pronunciar bien el inglés técnico de la documentación y sonar más profesional en las reuniones diarias con clientes de fuera.
Para un directivo, asuntos como seleccionar las estrategias de comunicación que importan en una negociación o que tu capacidad de liderazgo sea equivalente en inglés y en español.
Para un emprendedor con un proyecto innovador, ganar interés en inglés sabiendo perfilar el lenguaje de storytelling y pitching que abre puertas a clientes o posibles inversores.
No se trata de dar más contenido, sino de contenido con sentido. No de llenar, sino de filtrar. No de darlo todo, sino de escoger lo que te da ventaja y te ahorra tiempo para vivir, sobresalir o simplemente defenderte en tu entorno laboral y personal.
Igual que Spotify tiene tus playlists para que encuentres tu música adecuada según tu humor, yo selecciono por ti la parte del idioma que necesitas para que encuentres tu voz profesional en inglés.
Esto no es como prepararse un Cambridge donde darás todo el inglés habido y por haber para lograr un diploma final que acredite tu nivel para que en tu siguiente entrevista puedas decir con orgullo que cumples con el requisito burocrático de tener un ‘B2’. Venir a Quest! significa obtener nivel práctico de inglés real en aquello que necesitas en tu día a día y eso también tiene un valor altísimo.
Aquí puedes ver algunas de las áreas que puedes pulir conmigo.
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